La migración de grandes bibliotecas multimedia antiguas a sistemas modernos de administración de activos presenta muchos desafíos. Sin embargo, con las estrategias adecuadas, incluso las migraciones más complejas pueden tener éxito. En este artículo se describen los enfoques clave para superar los obstáculos más comunes en la transición de las carpetas compartidas tradicionales o los sistemas basados en cinta a la gestión de activos digitales. Si sigue estas estrategias, su esfuerzo de migración obtendrá resultados positivos, lo que se traducirá en un DAM próspero repleto de activos bien organizados y descritos que maximizan el valor para su organización.
Muchas organizaciones tienen grandes colecciones multimedia heredadas almacenadas de diversas formas, como carpetas compartidas, CD, DVD y bibliotecas de cintas. A medida que adoptan sistemas de gestión de activos digitales (DAM), la migración de estos activos al nuevo sistema puede ser un desafío. Estos son algunos de los problemas comunes a los que se enfrentan las organizaciones:
Sin embargo, al identificar los posibles obstáculos y prepararse para ellos, las organizaciones pueden desarrollar estrategias de migración eficaces que minimicen las interrupciones y los costos. La evaluación minuciosa del alcance del proyecto, la puesta a prueba y el establecimiento de expectativas realistas son claves para el éxito de la migración.
Antes de migrar los activos multimedia a un sistema de gestión de activos digitales (DAM), es fundamental evaluar y organizar adecuadamente esos activos. Esta etapa de preparación determina el éxito del proyecto de migración y la usabilidad continua de los activos del DAM.
El primer paso es comprender su colección actual, lo que implica hacer un inventario de los tipos de activos, como fotos, vídeos, ilustraciones, documentos y archivos de audio. También determina los formatos de archivo representados, la organización actual de los archivos y si las carpetas se pueden asignar a nuevas taxonomías. Comprueba si hay activos duplicados y revisa los metadatos existentes para identificar las brechas.
Puede revisar un pequeño porcentaje de los activos para obtener información preliminar sobre estos aspectos. Esto proporciona un punto de partida para planificar la migración e identificar los problemas.
Los activos se pueden organizar antes de la migración cambiando el nombre de los archivos de activos por nombres coherentes, descriptivos y estandarizados para facilitar la carga. Se puede eliminar el exceso de duplicados, lo que reduce la carga de trabajo de la migración. Las carpetas se pueden consolidar fusionando las carpetas redundantes y organizándolas en una estructura lógica. Se pueden agregar metadatos básicos, como títulos, descripciones y palabras clave, para empezar a crear registros de activos. Los activos incompatibles se pueden convertir a formatos compatibles con el sistema DAM. Se puede hacer una copia de seguridad de la colección para proteger los originales durante la migración.
La organización previa de los activos hace que el proceso de migración real sea más fluido y rápido. Sin embargo, planifique los esfuerzos continuos dentro del nuevo sistema DAM para mejorar aún más los registros y la organización de los activos.
A medida que los activos se preparan para la migración, se pueden recopilar estadísticas sobre el recuento total de activos, el desglose del formato de archivo, las brechas de metadatos estimadas, la cantidad de copias múltiples de archivos y las horas necesarias para actividades como el cambio de nombre de los archivos, la conversión y la asignación de metadatos. Estos datos son fundamentales para desarrollar un cronograma de migración realista, asignar recursos suficientes e identificar las posibles implicaciones presupuestarias.
También se deben determinar las funciones y responsabilidades en relación con las actividades de migración, los requisitos técnicos para el acceso a los archivos, las velocidades de carga y la conversión, y los planes de presentación de informes para hacer un seguimiento del progreso y los problemas.
Con una evaluación, un inventario, una organización y una planificación adecuados, la mayoría de los activos se pueden migrar al DAM de manera eficiente. Luego, concentre los esfuerzos restantes en describir completamente los activos del DAM para mejorar la búsqueda y la usabilidad, vincular los activos relacionados en grupos, eliminar las inconsistencias de los metadatos y mejorar la taxonomía y la estructura generales de las carpetas.
En resumen, un proceso exhaustivo y meticuloso de evaluación, organización y planificación de las colecciones de activos existentes sienta las bases para una migración exitosa a un sistema DAM. Con la preparación adecuada, la mayoría de los activos se pueden migrar de manera eficiente, sentando las bases para una mejora continua dentro del nuevo sistema a lo largo del tiempo.
La migración de grandes colecciones multimedia existentes a un sistema de administración de activos digitales (DAM) puede ser un proceso complejo y que consume muchos recursos. Adoptar un enfoque gradual y gestionar cuidadosamente la transferencia de metadatos puede mejorar los resultados. Una migración por fases le permite:
Las organizaciones que han migrado con éxito grandes colecciones multimedia a sistemas de gestión de activos digitales ofrecen lecciones valiosas que pueden ayudar a que las migraciones futuras sean más eficaces.
Comience con una planificación y preparación adecuadas. Realizar un inventario preciso de los activos, revisar los formatos de archivo y la integridad de los metadatos, probar el rendimiento del sistema y establecer los plazos son pasos iniciales fundamentales. La comprensión temprana de los posibles problemas y obstáculos permite elaborar estrategias de mitigación.
Adopte un enfoque gradual. Ampliar el esfuerzo de migración por etapas ayuda a probar los flujos de trabajo, identificar los cambios necesarios y optimizar los procesos antes de migrar grandes volúmenes de activos. Comience con los recursos más fáciles para adquirir experiencia antes de abordar los casos más difíciles.
Asigne el tiempo y los recursos adecuados. Las migraciones suelen requerir mucho más esfuerzo y duración de lo que se había estimado originalmente. Presupueste y personal para la revisión manual, el cambio de nombre de los archivos, la asignación de metadatos, las conversiones y los controles de calidad para adaptarlos al alcance de su colección.
Disponga de un sistema para hacer un seguimiento del progreso y los problemas. Los paneles, las hojas de cálculo y el software de gestión de proyectos ayudan a los equipos a cumplir con los plazos y, al mismo tiempo, documentan cualquier problema que surja para resolverlo. Los informes de progreso mantienen informadas a las partes interesadas.
Determine las funciones y responsabilidades por adelantado. Asegúrese de que los equipos sepan qué tareas de migración son responsables de completar y en qué momento. Establezca líneas de comunicación claras.
Brindar capacitación y apoyo al personal. Los miembros del equipo que ejecutan las tareas de migración necesitan instrucciones y orientación sobre los sistemas, los requisitos de metadatos, las convenciones de nomenclatura de archivos y más. Supervise la calidad del trabajo y brinde capacitación.
Fomente la aceptación organizacional de los cambios. Los contribuyentes de contenido son socios esenciales para la migración de activos y el éxito continuo del nuevo sistema. Explique cómo el sistema de gestión de activos beneficiará su trabajo. Obtenga información sobre las prioridades, la taxonomía y los metadatos.
Permita a los usuarios mejorar los registros de activos. Los colaboradores de contenido suelen poseer el conocimiento más completo sobre los activos. Permítales refinar y ampliar los metadatos dentro del sistema de administración de activos a medida que aprovechan los activos en sus flujos de trabajo.
Mapee la taxonomía y los metadatos heredados. La alineación de los campos y valores existentes con el nuevo esquema DAM facilita la transferencia automatizada. Los grupos y jerarquías de las estructuras de carpetas pueden asignarse a los encabezados de la nueva taxonomía.
Espera lo inesperado. A pesar de todos los esfuerzos, es inevitable que surjan complejidades y problemas imprevistos durante los proyectos de migración. La flexibilidad y la capacidad de adaptar las soluciones, solucionarlas y perfeccionarlas son habilidades valiosas que permiten corregir el rumbo.
Las migraciones son tareas de gran envergadura, pero si implementa cuidadosamente algunas o todas estas mejores prácticas para su situación y recopilación específicas, puede progresar de manera constante y, al mismo tiempo, minimizar las interrupciones. Con paciencia, rigor y las estrategias adecuadas, incluso las colecciones multimedia tradicionales más desalentadoras pueden transformarse en activos vivos y valiosos dentro de su nuevo sistema de gestión digital. Comience a implementar estos enfoques de migración hoy mismo para superar sus desafíos y sentar las bases para un proceso de administración de contenido multimedia más organizado, eficiente y efectivo en el futuro.
Aproveche la inteligencia artificial para mejorar su biblioteca multimedia, agilizar los flujos de trabajo e impulsar la colaboración, a la vez que mantiene sus activos seguros y organizados.
¿Estás listo para subir de nivel? ¡Conéctate ahora con un experto de ioMovo!